El verano es una época de sol y descanso que realmente mejora la salud y el estado de ánimo de la mayoría de las personas. Pero también en el verano hay ciertas afecciones que aparecen o empeoran durante este momento del año.
Las patologías típicas del verano son:
-Diarrea: El consumo de ciertos alimentos o agua no potable generan diarreas tanto en adultos como en niños. Se tiene que comer alimentos bien lavados o cocinados para evitar que bacterias ingresen al cuerpo y provoquen diarreas.
-Cistitis: El uso de baños públicos aumenta el riesgo de sufrir esta afección. Por lo que se debe solo concurrir a lugares que tengan condiciones higiénicas adecuadas.
-Diabetes: Algunos enfermos se sienten peor durante el verano debido a que el calor hace que la insulina sea absorbida más rápida por el cuerpo. Se debe beber agua durante todo el día para evitar la deshidratación, medir más seguido el nivel de glucosa y ajustar las comidas en esta época del año.
-Problemas de sueño: Es común que el calor impida dormir bien y de esta manera se tenga somnolencia o cansancio por el poco descanso.
-Quemaduras solares: Al exponerse más tiempo al sol aumenta la posibilidad de sufrir quemaduras en la piel. Se debe usar siempre protector solar en el cuerpo.
-Hongos en los pies: El calor y la transpiración son las principales causas de la aparición de hongos o pie de atleta. Usar calzado abierto, talcos o cremas para evitar o tratar los hongos es la mejor forma de combatirlos.
Es importante cuidar nuestra salud durante el verano para evitar enfermarnos en este momento del año tan agradable.
Si tenemos dudas debemos consultar al médico sobre la relación entre el verano y estas afecciones en la salud.