En algunas ocasiones al poco tiempo de comer vuelves a tener apetito y no te sientes saciado por varias horas como deberías.
El incremento del apetito más de lo normal puede estar asociado a diferentes trastornos o patologías.
El hambre excesiva puede ser producido por varias causas o factores como:
-consumir poca fibra: la fibra ayuda a saciar el apetito por más tiempo. Además mejora la absorción de grasas y azucares, la digestión es más lenta y esta de esta manera los alimentos hace sentir más llena por un tiempo extenso.
La dieta escasa en fibra hace que la digestión sea más rápida y se sienta hambre rápidamente.
-alto consumo de carbohidratos simples: Este tipo de alimentos aportan energía y azucares al cuerpo en forma rápida. Pero también se absorben velozmente por lo que se puede sentir hambre al poco tiempo de comerlos. En cambio sí se aumenta la ingesta de carbohidratos complejos se reduce el apetito.
-problemas de ansiedad y estrés: El estómago está muy conectado con el cerebro por eso cuando se pasan momentos de altos niveles de estrés o ansiedad se despierta el apetito. Comer por tensión es muy común en muchas personas.
-cambios hormonales: es frecuente que en las mujeres durante la menstruación embarazo, lactancia o menopausia se puede incrementar el apetito. En estas etapas el apetito se ve alterado y se sienten más ganas de consumir azúcar y grasas.
-Ciertas enfermedades también se asocian a mayor apetito de lo normal como diabetes, hipoglucemia, hipertiroidismo, entre otras.
Es importante investigar cuando se siente más apetito de lo habitual porque puede haber razones asociados a problemas de salud o malos hábitos alimenticios.
