Incluso una exposición a corto plazo al ozono troposférico, un contaminante dañino del aire, puede causar cambios potencialmente fatales al sistema cardiovascular, según un nuevo estudio del gobierno de EE.UU. muestra.
El ozono troposférico es creado cuando los contaminantes de la industria, vehículos, los disolventes químicos y las centrales eléctricas reaccionan a la luz solar. Los niveles son más altos en los meses del verano.
El estudio ofrece una explicación plausible para la relación entre la exposición al ozono aguda y la muerte, según afirma el autor principal del estudio Robert Devlin, científico en la Agencia de Protección Ambiental Nacional (EPA) de los EE.UU.
La EPA estima que entre 40.000 y 50.000 personas mueren en los Estados Unidos cada año a causa de la contaminación del aire, pero el mecanismo detrás de estas muertes no se comprende totalmente.
Para el estudio, los investigadores expusieron a 23 voluntarios, entre 19 y 33 años de edad, a una dosis de dos horas de la capa de ozono equivalente al estándar de capa de ozono de ocho horas de 0,076 partes por millón.
Durante un período de dos semanas, los participantes también estuvieron expuestos a un aire limpio durante dos horas. En ambas exposiciones, los adultos jóvenes alternaron entre intervalos de 15 minutos de pedaleo y descanso.
Aunque ninguno de los participantes se quejó de síntomas después de la inhalación de ozono, las pruebas inmediatamente después de la exposición revelaron que los jóvenes tenían graves cambios vasculares inducidos por el ozono troposférico en comparación con la exposición al aire limpio. Estos cambios incluyeron:
- Un aumento en un marcador de la inflamación.
- Disminución de la capacidad para disolver los coágulos sanguíneos que podrían bloquear las arterias.
- Cambios en el ritmo cardíaco.