Nuevas investigaciones muestran cómo las bacterias conocidas por causar enfermedad de las encías manipulan el sistema inmunológico del cuerpo para deshabilitar los procesos normales que de otro modo las destruyen.
Un nuevo informe de investigación publicado recientemente muestra cómo la bacteria conocida por causar enfermedad de las encías, Porphyromonas gingivalis, manipula el sistema inmunológico del cuerpo para deshabilitar los procesos normales que de otra manera la destruyen. En concreto, el informe muestra que este patógeno solicita la producción de la molécula anti-inflamatoria interleuquina-10 (IL-10). Esto, a su vez, inhibe la función de las células T, que de otro modo ayudarían a proteger al huésped de la infección microbiana particular.
Dado que más del 50% de la población de los EE.UU. de más de 50 años de edad desarrollan enfermedad periodontal, los investigadores esperan que los resultados del estudio, en última instancia, ayuden en el desarrollo de nuevos tratamientos que podrían prevenir o mejorar la infección crónica causada por el patógeno P. gingivalis.
Los hallazgos sugieren que el daño causado por P. gingivalis ocurre cuando las células inmunitarias del huésped se exponen por primera vez a este patógeno, y además implica que para que el tratamiento tenga éxito, debe iniciarse tan pronto como sea posible. Este estudio pone de relieve el mecanismo por el que P. gingivalis puede establecer una infección crónica en forma de enfermedad periodontal y da una idea de cómo se desarrolla la enfermedad.
Los resultados también demuestran la importancia de una intervención temprana, ya sea por la erradicación de la bacteria con agentes terapéuticos diseñados específicamente o por prevención mediante el desarrollo de una vacuna eficaz.